Revista de la Sociedad de Medicina Interna
          de Buenos Aires

          La Organización Mundial de la Salud y el Tabaco
 Prof. Consulto Jorge A. Pilheu


La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de adoptar una resolución de trascendental importancia para la salud de la población mundial vinculada con el consumo de tabaco.
En la Asamblea Mundial de la Salud reunida en junio de 2003 se ha aprobado el CONVENIO MARCO DE LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD PARA EL CONTROL DEL TABACO (CMCT).
Ya desde 1998 lanzó la iniciativa de liberarse del tabaco, y en conjunto con las Naciones Unidas, la Organización para la Agricultura y la Alimentación, la UNICEF, la Organización Internacional del Trabajo, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio están colaborando para reducir el consumo de tabaco en el mundo. El elemento fundamental de las iniciativas de la OMS de lucha contra el consumo de tabaco es la elaboración de un tratado internacional: el CONVENIO MARCO DE LA OMS PARA EL CONTROL DEL TABACO (CMCT) para responder a los problemas mundiales que los gobiernos nacionales no pueden responder por sí solos, así como para facilitar y coordinar la lucha en todo el mundo. 
El Banco Mundial (Banco Mundial. La epidemia de tabaquismo. Washington 2000) y otras instituciones coinciden en que las medidas más eficaces para reducir el consumo de tabaco son las políticas que reducen la demanda de los productos derivados del tabaco. Ellas son:

1. Aumento de impuestos al tabaco
2. Prohibir la publicidad, la promoción y el patrocinio del tabaco
3. Informar a los consumidores mediante campañas en los medios de comunicación y en todos los envases de la acción deletérea del uso del tabaco
4. Restringir el consumo de tabaco en los lugares públicos y de trabajo
5. Apoyar a los fumadores que quieren dejar la adicción
6. Controlar el contrabando

Se admite que, actualmente, 4 millones de personas mueren por año en el mundo debido a enfermedades tabaco-dependientes, y que, de continuar con la política de consumo de tabaco actual, esa cifra llegará a 10 millo-nes en el año 2030; de ella, el 70% de estas defunciones ocurrirán en los países en desarrollo (OMS. Informe sobre la Salud en el Mundo 1999, Ginebra OMS 1999).
Las tendencias actuales prevén que el número de fumadores en el mundo aumentará de 1.1 a 1.6 mil millones en el año 2025 por el simple crecimiento vegetativo de la población.
La repercusión de las medidas de lucha contra el tabaco se ha estudiado tanto en los países desarrollados como en aquellos en vías de desarrollo. La prueba de que el aumento de los impuestos reducen el consumo de tabaco provienen de Venezuela, Chile, Argentina y Sudáfrica, así como de varios países desarrollados.
La eficacia de advertencias sanitarias en los envases se ha demostrado en Tailandia y Polonia, así como en países desarrollados como Australia y Canadá.
La carga de la epidemia de tabaquismo se está desplazando del mundo desarrollado al mundo en desarrollo. La mayoría de los fumadores del mundo viven en países en desarrollo.
En Argentina las cifras actuales de consumidores de tabaco son realmente alarmantes. Fuman el 45,6% de los varones adultos y el 34% de las mujeres (Primer Estudio Nacional sobre Uso de Drogas, El Puente SEDRONAR 1999; 1(4): 8), con un promedio diario de 15,1 cigarrillos. En el año 2000, el 15,7% de las defunciones de adultos mayores de 18 años se debieron a enfermedades tabaco-dependientes, con un total de 39.131 muertes (R. Pitarque y col. en prensa).
El procedimiento que se siguió en la OMS para aprobar el Convenio Marco para el Control del Tabaco fue el siguiente: se estableció que en la 56º Asamblea Mundial de la Salud se considere la posibilidad de adoptar el Convenio de conformidad con el artículo 19 de la Constitución. Se lo adoptó con la resolución WHA52.18. Durante la mencionada Asamblea debían aprobarlo un mínimo de 40 Estados Miembros de la OMS, hecho que se alcanzó con la firma de 40 países Miembros y de la Comunidad Europea, en junio de 2003.
De América Latina, firmaron Brasil, Paraguay y Uruguay. Argentina no firmó. El resto de los 192 países miembros de la OMS tendrán plazo para firmar el Convenio Marco hasta el mes de junio de 2004, fecha en que el mismo funcionará en forma completa.
El texto acordado es un punto de referencia para el futuro de la Salud Pública Mundial, tiene repercusiones muy importantes para los objetivos de salud de la OMS e incorpora una nueva dimensión jurídica a la cooperación internacional en materia de salud pública.


Profesor Consulto Jorge A. Pilheu