Revista de la Sociedad de Medicina Interna
          de Buenos Aires

           Medicina: ciencia? arte? ciencia y arte?

Hace pocos d�as, el 25 de abril de 2003, se reunieron algunos m�dicos para conmemorar los 35 a�os de socios unos y los 50 a�os otros. Cl�nicos, cirujanos, pediatras, ginec�logos, radi�logos (hoy imagen�logos).
Todos se preguntaban entre s�: qu� ha subsistido de la medicina de hace cuatro o cinco d�cadas? Cu�nto cambio, cu�nto progreso! En las ramas b�sicas y aplicadas, en la Gen�tica, la Inmunolog�a, la Epidemiolog�a con sus infalibles c�lculos de probabilidades. Y la Infectolog�a actual con esa aparici�n nefasta, catacl�smica del SIDA! Y de la vieja Radiolog�a qu� qued�? Ahora es la pujante, joven Imagenolog�a que avanza al tambor batiente de los sones de la Ecograf�a, la tomograf�a computada, la resonancia magn�tica, la c�mara gama. Y la primigenia medicina de agudos se ha transformado, a horcajadas de las bienaventuradas Unidades de Cuidados Especiales o de las Terapias Intensivas, en la portentosa Emergentolog�a de hoy.
Ya en el terreno de la Medicina Interna tomemos como paradigma la Cardiolog�a. Qu� han quedado de los m�s mentados soplos y de las nemot�cnicas para recordar los "chasquidos"y "refuerzos sist�licos y diast�licos"? De los o�dos privilegiados capaces de detectarlos y, a la vez, de la personalidad necesaria para convencer a su auditorio que los mismos asentaban en cierta v�lvula y no en su imaginaci�n? Hoy todo es "fono", "angio", "doppler", "holter", "spect", etc. No resta ya casi espacio para los ungidos magos de la auscultaci�n.
Todo ese aluvi�n de progreso provoca, en el hoy maduro m�dico, una mixtura de sensaciones: asombro, estupor y, a la vez, j�bilo y gratitud por esa medicina pr�diga en hechos objetivos, indubitables. Por ejemplo, ve con ojos azorados que la Imagenolog�a no ha dejado un recoveco de la anatom�a sin descubrir y exhibir con pormenorizados detalles.
Y entonces surge, como en toda reuni�n m�dica que examina el pasado y otea el porvenir, el eterno dilema: la medicina es s�lo ciencia?; o es ciencia y arte? O es ciencia, arte y algo m�s? La ciencia es un c�mulo de conocimientos ciertos de las cosas por sus principios y causas y, a la vez, un cuerpo de doctrina met�dicamente formado y ordenado, que constituye un ramo particular del saber humano, en nuestro caso de la medicina. El arte es, por otra parte, la virtud, habilidad del hombre para "hacer alguna cosa", la facultad o "el acto", mediante los cuales el sujeto, vali�ndose de la materia, la imagen o el sonido, imita o expresa lo material y lo inmaterial, ya sea copiando o fantaseando.
La ciencia es objetiva, sus conocimientos son ponderables, mensurables, previsibles, reproducibles. El arte, en cambio, es subjetivo. La subjetividad es su cualidad inherente. La obra de arte -sea una sonata, un cuadro- surge en un destello del sujeto, es un hecho �nico, irrepetible del artista. No se debe confundir ciencia con tecnolog�a. Los adelantos de la medicina actual son frutos, en gran medida, de los avances tecnol�gicos. La medicina de hoy es altamente especializada, trabaja en equipo y posee una extrema tecnificaci�n.
La medicina como cuerpo, como cuerpo de doctrina de los conocimientos m�dicos, es una ciencia y debe tender a serlo cada d�a m�s. Con el s�lido aporte de las ciencias b�sicas, de la estad�stica y de la riqu�sima tecnolog�a actual, su rumbo hacia la ciencia ser� firme. Pero en la b�squeda de la verdad, asaz esquiva, �debe ser s�lo ciencia? �No resta ni un m�nimo espacio para la subjetividad, para el arte? Es de anhelar que s� y que hablar de arte en medicina no sea una apostas�a de la ciencia.
Al fin de cuentas �qu� es del innegable "ojo cl�nico"? Una cualidad tan subjetiva, tan ligada con el arte diagn�stico! Por supuesto sin caer en excesos, debe ser una resultante de tres ingredientes imprescindibles: s�lidos conocimientos, larga experiencia y talento personal. Este �ltimo rasgo concierne a la subjetividad y es lo que determina que un m�dico estudioso lo posea y otro, tambi�n estudioso y experimentado, lo carezca. Y que decir del "cuadro cl�nico" de los internistas. �Por qu� se le ha denominado "cuadro" si no se ve en �l, en forma impl�cita, una obra de arte?
La historia de la medicina ha sido pr�diga en m�dicos poseedores de la gracia m�gica que permite aunar ciencia y arte. Cuando Edward Jenner, m�dico rural ingl�s, una de las figuras m�s luminosas de la medicina, el 14 de mayo de 1796, ese bendito d�a para humanidad, inocul� al ni�o James Phipps, con el pus tomado de la p�stula de la campesina Sara Nelms, no s�lo descubri� su vacuna, sino que ech� a vuelo el concepto universal de "la vacuna". Y, a la vez, realiz� con verdadero arte la simpl�sima t�cnica de la escarificaci�n y describi� sus hallazgos en un librito art�sticamente hermoso. Fue una observaci�n emp�rica, un hecho cient�fico realizado con arte y fantas�a. El descubrimiento se expandi� milagrosamente, como en aras de un soplo divino, y comenz� a salvar millones de vida. Ciencia, arte y algo m�s.
Tomas Sydenham, el "Hip�crates ingl�s", aconsejaba a los j�venes la lectura de "Don Quijote" si deseaban ser buenos m�dicos. Renato T. Laennec, el genial cl�nico franc�s, inventor del estetoscopio, describi� sus observaciones en p�ginas de tal belleza, que su libro "De l'auscultation m�diale"es un monumento de la ciencia y del arte literario. William Osler, poseedor de una legendaria vast�sima cultura, dec�a que el estudiante que no sea culto, no ser� "ni culto ni m�dico". Gregorio Mara��n, fundador de la endocrinolog�a moderna de Espa�a, fue un erudito y brillant�simo hombre de letras. Albert Schweitzer, fil�ntropo y m�dico franc�s, music�logo, insuperable int�rprete del �rgano y de la obra de Bach, representa la sublime unidad de ciencia y arte. Schweitzer era adem�s un hombre religioso; encarnaba la simbiosis ciencia-arte y algo m�s. 
El dilema "medicina: ciencia o arte" se lo han planteado nuestro abuelos y padres m�dicos, nos lo planteamos nosotros hoy y se lo continuar�n planteando nuestros hijos, nietos y bisnietos m�dicos. Acabamos de compartir el 26� Congreso de Medicina Interna y 3er Congreso Latinoamericano de Medicina Interna y ya se avisora el Congreso Mundial de Medicina Interna 2008, que convocar� a los internistas del mundo en la Argentina. Ser�n otras reuniones de m�dicos en el que el dilema estar�, de modo impl�cito o expl�cito, presente. Es de anhelar que la discusi�n se plantear� con socr�tica modestia, teniendo in mente que, m�s importante que cualquier ef�mera verdad o conclusi�n es el intercambio respetuoso de ideas, ya que como nos ense�� Hip�crates en su Aforismo N� 1 "La vida es corta, el arte largo, la experiencia enga�osa y el juicio arduo".


Federico A. Marongiu